La entrada de hoy es uno de estos resúmenes que hago de tiempos en tiempos. Tiene poca costura y por eso te dejo unas fotos aleatorias para distraerte.

Siempre que voy a escribir un resumen abro la entrada anterior y veo dónde he parado, pero tengo un rechazo a leer posts antiguos. No me gusta nada escuchar mis podcasts, rever vídeos, cursos o fotos que publiqué. Quizás porque soy muy crítica y quiero evitar la tentación de borrar todo. Empiezo a escribir, procrastino y el pensamiento vuelve como una pesadilla, dejaste el post a medias.

Aprendí recientemente que todos tenemos un grupo de caracteres que definen la personalidad (puedes clicar en el enlace y probar el teste gratuito tú misma), dos de mis rasgos más fuertes son la perseverancia y la prudencia. Pues imagina que tardo mucho en tomar una decisión y, cuándo finalmente decido por algo, tengo que ir hasta el final, no puedo dejar las cosas a medias. Pensé que eso era resultado del perfeccionismo y la autoexigencia, pero aparentemente no.

Por eso, estoy aquí de vuelta en el blog intentando escribir por tercera vez.

Escribir no me sale fácil porque, por un lado, leo poco y, por el otro, la lengua no me sale naturalmente. Probé por la newsletter, luego vi que era mejor solo hablar de costura y ahora ni de eso quiero escribir. No sé si las redes sociales te dan la ambigua y falsa sensación de que están todos interesados y cerca, y al mismo tiempo no se importan ni una mierda contigo.

Definitivamente, el mejor sitio para soltar mi monólogo interior es aquí por el blog siguiendo mi antiguo diario de naii. Es una pena que nadie se profundice más en los blogs.

La cuestión es que este mes me hago mayor, buuuu, con suerte tú también. Felicidades para ti que cumple años conmigo todos los años. Ocho años atrás me cruzaron los cables, no me reconocía y tampoco mundo exterior. Era como si estuviera en la oscuridad un buen rato y de repente alguien encendiera la luz. Creo que fue el resultado de esta vida frenética que llevamos sin parar, haciendo y produciendo constantemente, saltando de una cosa a otra como si todo fuera escapar.

Este año me obligué a cambiar el rumbo. Venía arrastrando desde hace tiempo el peso de la web y mi agonía con mantenerme a flote, lo que mermó mi placer por crear. Ya en mi última entrada te conté que no podía más. Me sentía atrapada. Las cosas de la web no han ido ni van a mejor, sino todo lo contrario. No estar pendiente de las redes y de generar contenido, dejar de escribir newsletter y tutoriales solo hizo que desapareciera de las redes y consecuentemente los beneficios de la web.

Tengo en mi catálogo sobre 85 patrones de costura, unos pocos cursos y muchas entradas de tutoriales. Año pasado de los diez patrones “más vendidos” de mi tienda 7 son gratuitos, fue mitad de la “venta” de todo el año, siendo que no he vendido ni 10 unidades de 60% de los patrones. Este año el Gorxa dio un gran empujón y saltó primero de la lista superando los gratuitos, pero los números hablan por sí solos y 90% de los patrones apenas se venden. Estoy pensando en eliminar los patrones gratuitos de la tienda porque los que vienen por el gratis no vienen a comprar. (Editado: A partir de agosto de 2023 los patrones de patchwork, mochila mini Jota, camiseta simple infantil y neceser viaxe dejan de ser gratuitos, los demás de la pestaña “gratis” pueden ser descargados directamente en la tienda sin necesidad del cupón de la newsletter).

Aquí entra mi tercera característica más fuerte, la honestidad, no he acertado con la web. Te dejo dos consejos, no me uses de referencia de suceso y evita regalar tu trabajo.

Después de rumiar mucho, entendí que no por lanzar más patrones y trabajar más horas voy a vender más. Aunque sea muy claro, tardé mucho en no sentir el fracaso como parte de lo que soy, sino de lo que hago.

La perseverancia es la causa por la que sigo por aquí y amor al arte. La cuestión es que me gusta estar en mi cueva dibujando y probando patrones. Tomo cada uno como una superación personal. “Solo sé que nada sé” decía Sócrates y tengo la sensación que hay mucho más por aprender. Soy curiosa, me rejuvenece probar cosas nuevas y adquirir conocimiento.

Recientemente, me apunté a este curso online (nada que ver con costura) de la Universidad de Yale con Laurie Santos, tiene la misma serie hecha especialmente para adolescentes en Youtube , también puedes escucharla en una entrevista en Aprendemos juntos BBVA. Dice que la mente nos engaña, lo que deberías querer no le estás dando atención y que pierdes tiempo con cosas que no sirven de nada.

Para cuidar del cuerpo me apunté a clases online con Mira aquí. Soy muy disciplinada y, como te he dicho antes, una vez que empiezo no puedo parar. Estoy siendo constante con el pilates. Como dice Laurie, saberlo no es medio camino andado si no lo aplicas. Sabes que es bueno hacer ejercicio, que debes dejar de fumar y beber, que deberías dejar de picar entre horas, que deberías eso y aquello, pero si no los incorpora en tu rutina, de nada vale. La dura realidad de la falta de motivación. Si te ves en una encrucijada, igual te ayuda mirar hacia otro lado y tomar un poco de perspectiva. Por si te sirve de algo, cambia de hobby, busca otras actividades que te den placer y deja las redes sociales. Verás que refresca la vida, elimina la culpa y la comparación.

Mis 47 fueron de decisiones y aprendizaje. Profesionalmente he crecido, infelizmente no financieramente. Cada patrón me ha aportado más conocimiento, por eso me siento menos impostora y más segura. Estoy física y espiritualmente mejor que año pasado, pero todavía me cuesta hacer flexiones y meditar. Mi familia está bien, todo fluye naturalmente aunque veo amigos sufriendo y pasando por un mal momento. Si es este tu caso, te mando un abrazo fuerte.

Para terminar este post, querida Naii, cuando vuelvas a leer esta entrada espero que sigas descubriendo nuevos caminos que te traigan bien estar y reforzando los que te han hecho llegar hacia aquí.

Y tú, fiel lectora, gracias por estar por aquí otro año más.

¡Buen verano chicas!

*Nota: cruza los dedos para que en 2024 termine este patrón de bañador que me está danto mucha lata.